El barco de la prefectura naval de Argentina GC-28 atacó el martes 15 de marzo al pesquero chino Lu Yan Yuan Yu 010 cuando pescaba ilegalmente a través de Puerto Madryn en la provincia de Chubut (sur de Argentina), dentro de la Zona Económica Exclusiva Argentina (ZEEA).
Miguel Reyes, jefe y portavoz de la prefectura, explicó a los medios que el barco chino estaba dentro de las 200 millas argentinas y cuando se les dio la orden de apagar los motores, la embarcación huyó y comenzó una persecución.
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El funcionario indicó que el guarda costa de Argentina efectuó un disparo intimidatorio pero el barco chino no acató la orden y huyó nuevamente. De esta manera, el buque argentino disparó a la proa y provocó el ingreso de agua a las cámaras del pesquero y este comenzó a hundirse.
El capitán de la embarcación china, junto a otros tres tripulantes, permanecen detenido por las autoridades argentinas a la espera de que esclarezcan los hechos. El resto de la embarcación, 28 personas en total, fueron rescatados por otro navío chino que se encontraba cerca de las aguas argentinas y están a salvo.
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China insta a investigar el incidente
La cancillería y embajada de China en Argentina presentaron una gestión diplomática ante el país suramericano para manifestar su "grave preocupación" por el hundimiento del barco pesquero en las costas argentinas.
El portavoz del ministerio de Asuntos Exteriores chino, Lu Kang, aseguró en un comunicado que su país sigue con "elevada atención" el asunto, por lo que pide una exhaustiva investigación y que se le mantenga al tanto.
Kang también señaló que Argentina debe velar por los derechos e intereses de los tripulantes y que en lo sucesivo debe tomar "medidas efectivas" para "evitar que vuelva a ocurrir" un incidente similar.
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En la nota, China contrastó la versión aportada por las autoridades argentinas sobre cómo ocurrieron los hechos y aseguraron que el pesquero fue perseguido durante varias horas por los guardacostas argentinos y después recibió disparos que causaron su hundimiento.
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