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La movilización se produjo por el rechazo del mundo musulmán a declaraciones del presidente francés sobre el Islam.
Decenas de miles de manifestantes marcharon por la capital de Bangladés, Dacca, pidiendo un boicot a los productos franceses en protesta a los recientes comentarios del presidente de Francia, Emmanuel Macron, sobre el Islam.
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Los manifestantes quemaron el martes una efigie de Macron durante su marcha en Dacca, coreando: “Boicot a los productos franceses”.
Macron ha provocado indignación en todo el mundo musulmán al describir al Islam como una "religión en crisis"".
This situation does not bode well for the relations between the EU and the Muslim world. Muslims’ perception of Europe will only deteriorate further but they will not respond in kind. Muslims will not fall into Macron’s trap of hatred and division.
— Fahrettin Altun (@fahrettinaltun) October 26, 2020
El líder francés también anunció un plan "para reformar el Islam" con el fin de hacer que los 6.000.000 de musulmanes sean más compatibles con los valores republicanos de Francia.
Las tensiones aumentaron aún más después del asesinato de Samuel Paty, un maestro de escuela secundaria que mostró a sus alumnos dibujos satíricos el profeta Mahoma durante una discusión sobre la libertad de expresión.
Los musulmanes consideran que las caricaturas fueron producidas con la intención deliberada de burlarse de su comunidad en su conjunto.
Las imágenes del profeta Mahoma fueron publicadas por primera vez hace años por la revista satírica francesa Charlie Hebdo, cuyas oficinas editoriales fueron atacadas por hombres armados en 2015, matando a 12 personas.
La manifestación, encabezada por el partido islamista Movimiento Islámico de Bangladése y que, según los datos de la policía, comenzó hacia las 10H30 (04H30 GMT) en la puerta norte de la mezquita capitalina Baitul Mukarram.
En Dacca, la policía estimó que más de 40.000 personas se sumaron a la marcha organizada por el Islami Andolan Bangladesh (IAB), uno de partidos islamistas más importantes del país.
La protesta fue detenida antes de que pudiera acercarse a la embajada francesa en la ciudad.
Cientos de policías levantaron barricadas con alambradas para bloquear a los manifestantes, que se dispersaron sin violencia.
La marcha empezó delante de la Baitul Mukarram, la principal mezquita de Bangladés, un país cuya población es mayoritariamente musulmana.
Semejantes protestas se han producido en la Franja de Gaza y Cisjordania, Pakistán, Jordania, Turquía y Arabia Saudita, entre otras naciones árabes.
