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El jefe de Estado boliviano externó su esperanza porque pronto termine la "injusta persecución" contra el periodista australiano.

El jefe de Estado boliviano externó su esperanza porque pronto termine la "injusta persecución" contra el periodista australiano. | Foto: @wikileaks

Publicado 18 diciembre 2022



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En la reunión, el presidente habló de las graves implicaciones para la libertad de prensa si Assange es extraditado a los EE.UU.

El presidente de Bolivia, Luis Arce, se reunió este sábado con una delegación de WikiLeaks en La Paz, marco en el cual expresó su apoyo total a la libertad y retirada de cargos del fundador de esa plataforma informativa, Julian Assange.

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En el encuentro, en el cual también participó la ministra boliviana de la Presidencia, María Nela Prada, Arce le dijo al editor en jefe de WikiLeaks, Kristinn Hrafnsson, y al editor Joseph Farrell, “que apoya totalmente a Assange”, indicó el medio en su cuenta oficial de Twitter.

El islandés Hrafnsson, por su parte, publicó en la misma red social que el presidente boliviano “suma su voz a quienes luchan por la libertad de Assange y pide que se retiren los cargos de Estados Unidos (EE.UU.) en su contra”.

“En una reunión privada hoy, el presidente habló de las graves implicaciones para la libertad de prensa si Julian es extraditado a los EE.UU.”, mencionó.

El jefe de Estado del país suramericano, de su lado, dijo sobre la cita que: “Coincidimos en que uno de los fundamentos de la democracia es no condenar el derecho a decir la verdad, como lamentablemente ocurre con el periodista Julian Assange. Esperamos que pronto termine su injusta persecución”.

El 17 de junio pasado, la ministra del Interior del Reino Unido, Priti Patel, aprobó la extradición de Assange a Estados Unidos, donde podría ser condenado a 175 años de cárcel.

Washington reclama la extradición de Assange desde Reino Unido, donde el periodista australiano se encuentra detenido desde 2019, para juzgarlo por 17 presuntos delitos en violación de la Ley de Espionaje de 1917 y uno de intromisión informática.

Las imputaciones se relacionan con el acceso y la publicación de partes militares sobre Irak, Afganistán y la base ilegal de Guantánamo, así como informes diplomáticos que revelan  crímenes de guerra y otros abusos cometidos por oficiales y autoridades estadounidenses.


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