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El activista James Escobar participaba en la sustitución de cultivos ilícitos y otros trabajos comunitarios de Tumaco, Colombia.

El activista James Escobar participaba en la sustitución de cultivos ilícitos y otros trabajos comunitarios de Tumaco, Colombia. | Foto: El Espectador

Publicado 30 agosto 2018



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El Secretario de Nariño, Édgar Isandará, afirmó que no han recibido respuesta del Gobierno Nacional ante la violencia que se vive en el estado de Nariño. 

El líder social de la Junta Veredal de Miras, James Escobar fue asesinado en Tumaco, estado de Nariño, Colombia.

De acuerdo con medios locales, Escobar fue interceptado por unos hombres armados, cuando viajaba en su lancha en el río Mira del la zona rural de La Playita.

Los sujetos, quienes aún no han sido identificados, se trasladaban en otra embarcación y dispararon contra el líder social colombiano, quien cayó al agua de inmediato. 

Asimismo, el Ejército de Colombia halló el cuerpo de Escobar en horas de la mañana de este jueves, en una de las playas del afluente, posteriormente el cadáver fue llevado a la morgue para realizar las pruebas de autopsia. 

Por su parte, el Secretario de Nariño Édgar Isandará repudió el homicidio del también miembro de la Junta Directiva del Consejo Comunitario Alto Mira y Frontera, al tiempo que denunció que el Gobierno Nacional no ha tomado ninguna medidas de protección y seguridad que se han perdido para la zona. 

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"Desde la gobernación rechazamos estos actos de violencia, son muy preocupantes las amenazas hacia los distintos grupos sociales y los consejos comunitarios (...) pedimos que sea urgente la protección de estos lideres", exigió Isandará.

"Le solicitamos al Gobierno Nacional más atención para esta zona (...) ojalá se agilicen las medidas en esa comunidad puesto que las amenazas son constates”, agregó. 

James Escobar vivía por la carretera de Tumaco y se dedicaba a la distintas actividades de producción, trabajos comunitarios en aras de promover la protección de los derechos humanos de los grupos indígenas y  la comunidad en general.

Además participaba junto a sus organizaciones en la sustitución de cultivos ilícitos de coca, razón por la que la zona y todos los miembros han sido "declarados objetivo militares". 


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