México rechaza la ofensiva militar de Israel sobre Rafah

El Gobierno de México ha manifestado su rechazo al despliegue de las Fuerzas de Defensa de Israel en la ciudad de Rafah, al sur de la Franja de Gaza, en medio de una operación terrestre emprendida por el país sionista en dicha región. 

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En un comunicado oficial, el Gobierno mexicano expresó su profunda preocupación por las posibles consecuencias catastróficas que esta acción militar podría acarrear para la población civil asentada en esa localidad.

"El Gobierno de México condena la ofensiva militar de las Fuerzas Armadas de Israel contra la ciudad de Rafah y externa su profunda preocupación por las consecuencias catastróficas que tal avanzada puede significar para la vida de miles de civiles asentados en dicha localidad", refirió en un comunicado.

En este sentido, México ha condenado los ataques contra la población civil, considerándolos como una grave violación al derecho internacional humanitario. Asimismo, instó a un cese inmediato de las hostilidades con el objetivo de sentar las bases para la consecución de la paz en la región.

El Gobierno mexicano hizo  un llamado para que la ayuda humanitaria llegue sin obstáculos a toda la Franja de Gaza, con el fin de asistir a la mayor cantidad posible de personas y prevenir el agravamiento de la crisis humanitaria en la zona.

"México hace votos para que la ayuda humanitaria llegue sin contratiempos a toda la Franja de Gaza, a fin de que alcance urgentemente al mayor número posible de personas y se evite la agudización de la tragedia humanitaria", agregaron. 

Además, la Administración encabezada por el presidente Andrés Manuel López Obrador ha reafirmado su compromiso de seguir abogando por la resolución de las tensiones entre Israel y Palestina en el ámbito de las Naciones Unidas. México continuará promoviendo la solución de los dos Estados como el enfoque estructural necesario para poner fin al conflicto palestino-israelí.

Contexto: Operación terrestre israelí en Rafah 

El 7 de mayo, el Ejército israelí anunció el inicio de una operación terrestre en Rafah, una ciudad donde residen más de 1,4 millones de personas desplazadas por la guerra en Gaza.

Ante este suceso, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, advirtió que dicha estrategia podría desencadenar un desastre político y humanitario de proporciones superiores a la crisis actual en la región.

Guterres ha exhortado al Gobierno de Israel a detener cualquier escalada y a sumarse de manera constructiva a las negociaciones diplomáticas en curso.

El secretario general de la ONU ha calificado un ataque a Rafah como un error estratégico, una calamidad política y una pesadilla humanitaria, en medio de las conversaciones entre Israel y el movimiento palestino Hamás en Egipto para lograr un cese al fuego en la Franja de Gaza.