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Los enviados de China y Rusia en los Estados Unidos, Quin Gang y Anatoly Antonov, respectivamente, señalaron el carácter excluyente de la Cumbre.

Los enviados de China y Rusia en los Estados Unidos, Quin Gang y Anatoly Antonov, respectivamente, señalaron el carácter excluyente de la Cumbre. | Foto: @RusEmbUSA

Publicado 29 noviembre 2021



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Los diplomáticos de China y Rusia señalaron que la cumbre retorna a los momentos de la Guerra Fría.

Los embajadores de China y Rusia en Estados Unidos denunciaron que la denominada Cumbre por la Democracia es una clara declaración de oposición al venidero evento como parte de la mentalidad de Guerra Fría de La Casa Blanca, que solo crearía nuevas “líneas divisorias”.

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El mensaje conjunto emitido al más alto nivel recuerda también al público sobre lo dolorosas que fueron las confrontaciones impulsadas por la ideología y que algunas exrepúblicas soviéticas aún se están recuperando de las secuelas de las revoluciones de color impulsadas por EE.UU., en un momento donde es importante para naciones como China, encontrar su propio camino.

Titulado “Respetando los derechos democráticos de los pueblos”, el artículo de los respectivos enviados de China y Rusia a los Estados Unidos, Quin Gang y Anatoly Antonov fue publicado en medios locales de la nación norteamericana.

Los diplomáticos aseguran que la Cumbre, a celebrarse el 9 y 10 de diciembre, provocará una ruptura del mundo. “Esta tendencia contradice el desarrollo del mundo moderno”, señala el texto.

Funcionarios chinos y rusos criticaron que la Administración Biden publicara una lista de participantes oficial para la cumbre el pasado miércoles, donde se incluye a la isla de Taiwán entre los países soberanos, mas excluye a países como China, Rusia y Singapur.

“Lo que China tiene es una democracia socialista extensa y de proceso completo. Refleja la voluntad de la gente, se adapta a las realidades del país y goza de un fuerte apoyo de la gente. En China, la gente tiene derecho a elecciones y puede involucrarse profundamente en la gobernanza nacional”, reflejó Quin Gang en el artículo.

A su vez, señalaron que utilizan los denominados valores democráticos para instigar nuevos enfrentamientos. El consejero de Estado y ministro de Relaciones exteriores chino, Wang Yi, aseveró el pasado viernes que la cumbre solo traerá energía negativa al mundo.

“La práctica de la democracia varía según las diferentes condiciones nacionales y no puede ser una plantilla o un estándar”, insistió Wang.

Por su parte, el Kremlin reiteró que la Cumbre es un intento de crear líneas divisorias. “La democracia no es una prerrogativa de un determinado país o de un grupo de países, sino un derecho universal de todos los pueblos. Se puede realizar de múltiples formas y ningún modelo puede adaptarse a todos los países”, indicó el representante diplomático ruso.

Anatoly Antonov agregó que “ningún país tiene derecho a juzgar el vasto y variado panorama político del mundo con un solo criterio, y hacer que otros países copien el sistema político a través de revoluciones de color, cambios de régimen e incluso el uso de la fuerza va en contra del derecho internacional y es obviamente antidemocrático”.

“Rusia es un estado federado democrático gobernado por la ley con una forma republicana de gobierno. La democracia es el principio fundamental de su sistema político. Las instituciones democráticas se fortalecieron aún más con las enmiendas a la Constitución aprobadas mediante referéndum en 2020”, continúa el comunicado.

A su vez, los diplomáticos indicaron que un gobierno verdaderamente democrático apoyará la democracia en las relaciones internacionales y no fomentaría la hegemonía ni la división en el extranjero.

“No se deben violar los intereses de soberanía, seguridad y desarrollo de un país. Interferir en los asuntos internos de otros países, con el pretexto de luchar contra la corrupción, promover los valores democráticos o proteger los derechos humanos, obstaculizar su desarrollo”, alertaron.

Ambas naciones llamaron a dejar de utilizar la “diplomacia basada en valores” para provocar la división y confrontación, “practicar el respeto mutuo y la cooperación de beneficio mutuo en las relaciones internacionales”.


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