El presidente de Rusia, Vladímir Putin, llegó a la base aérea de Jmeimim en Siria para encontrarse con el presidente Bashar al Assad y autorizar la salida de una parte de las tropas rusas que han colaborado con la militancia siria con el objetivo de derrotar al grupo terrorista autodenominado Estado Islámico (Daesh en árabe).
En el encuentro, Putin felicitó a sus tropas por la gran labor que han hecho en los últimos meses y por la derrota del Daesh que calificó como una "victoria deslumbrante".
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En la retirada de las tropas estuvieron presentes el ministro ruso de Defensa, Serguéi Shoigú, y el comandante de las Fuerzas rusas en el país árabe, el coronel general Serguéi Surovikin.
Asimismo, el jefe de la Dirección de Operaciones del Estado Mayor de Rusia, el coronel general Serguéi Rudskoi, explicó que más de 550 terroristas fueron abatidos por el Ejército sirio con la colaboración de la aviación de la Fuerza Aeroespacial rusa.
Además, informó que lograron eliminar 91 vehículos con ametralladoras, seis carros de combate y 14 carros bombas.
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Se estima que Putin parta este mismo lunes a Turquía y Egipto para reunirse con los presidentes de estas naciones y establecer acuerdos importantes entre los tres países.
El pasado 9 de diciembre, el canciller ruso Serguéi Lavrov, aseguró que el Daesh fue vencido por completo en Siria gracias a la colaboración del ejército de ambos países.